sábado, 5 de septiembre de 2009

En el nombre del padre

¿Fuiste tú mi decisión? No encontró respuesta...
-puedes irte en busca de tu elegido.

Yo soy una de las grandes maldades de tu creación, el arrepentimiento crece en cada una de tus miradas, pero me consuela saber que hay más detras de mi y no son personas.
Mi libertad te parece castigo. Desearías obtener lo repugnante de mi sangre y llorar sobre mis heridas.
Tu contrariedad me enseña que es tiempo de mi partida.
Una lágrima me invade pero tu omnipotencia logra hacer sangrar mi rostro. Una huella que te marcó y sometió bajo el seudónimo de padre.
Extraño tu ausencia y hegemonía sobre mi dolor. Conociste mis razones pero no lograste integrarte a mi conocimiento. Clamas tu obsesión de poder y yo reclamo mi ventaja de elección.
Horas en el interrogatorio y me dijiste culpable, contarás mi sentencia, pero tu crimen... habita en mi.


Sólo me pregunto: ¿mi sangre será la misma o es que siempre fue mala?...

3 comentarios:

  1. sinceramente me recordó mucho la relacion que tengo con mi padre, buen poema

    ResponderEliminar
  2. Tienes mi atención.
    A veces cuando pierdes, ganas.

    ResponderEliminar
  3. Son más las veces que he perdido al intentar ganar, hoy no tengo vibras y desería no tener oídos.

    ResponderEliminar